FORMACIÓN • PROCESOS DE SELECCIÓN • CONSULTORÍA

El valor más importante de una compañía es el capital humano, es una pieza estratégica para cualquier organización, aunque esta pieza sea un peón. Por ello desde Lendinez Consulting mimamos todo el proceso que conlleva la incorporación de un nuevo candidato y así conseguir la incorporación de los mejores y más adecuados profesionales para su negocio:

Buscar, captar, seleccionar y evaluar.

"Cuando el capital y la tecnología son accesibles a todos por igual, lo que marca la diferencia es la calidad del capital humano."
Tom Peters.

Nuestros consultores cuentan con más de 15 años de experiencia en la selección de personal. Realizamos un seguimiento de su proceso de selección totalmente personalizado. 

¿Qué metodología utilizamos en el proceso de selección?

• Definición del perfil: se realiza conjuntamente con la persona responsable de la empresa proporcionando la información necesaria para conseguir la adecuación al puesto.

• Estrategia de búsqueda: Anuncios en los principales portales de empleo, anuncios en prensa, bolsas de empleo universitarias, de colegios profesionales y a través de investigación de mercado. También contamos con nuestra red de contactos.

• Evaluación de los candidatos: Entrevistas, pruebas de conocimiento, pruebas de personalidad y competencias

• Presentación del candidato: Realizamos un informe de los candidatos finalistas.

Durante el proceso de selección a los candidatos se les hace una “venta” de la empresa de forma que le sea lo suficientemente “atractiva” para que quiera incorporarse a ella con un alto grado de “motivación”
Se presentan al cliente los mejores candidatos preseleccionados para que pueda entrevistarlos y decidir cuál es el más idóneo para la incorporar a la empresa.

• Seguimiento y garantía: Una vez incorporado el candidato, se hará un seguimiento periódico para asegurarnos de la perfecta integración de este profesional en su empresa.

Todos nuestros procesos de selección están GARANTIZADOS y contemplan una validez de 3 meses a partir de la incorporación del trabajador a la empresa, tanto en el supuesto caso de que el candidato no se adaptara a su puesto de trabajo y tuviera que ser despedido como éste presentara su dimisión voluntaria.